Debe ser el calor propio de estas fechas pero no acabo de pillar el punto a la propuesta del atractivo turístico de los angelotes. Me explico: resulta que una especie de peces, denominada científicamente squaitina squatina, o más popularmente como angelotes o tiburones ángel, ha decidido muy sabiamente que la playa tinerfeña de Las Teresitas es un estupendo lugar para procrear y alimentarse, que la cosa esta muy malita en aguas abiertas y al parecer la sufren riesgo de extinción. La convivencia con los bañistas tiene sus más y sus menos, porque a estas lindas criaturitas, con forma de pez raya, no les gusta ser molestados y si cometes el error de pisarles te arrean un mordisco, como lo atestiguan media docena de bañistas que tuvieron que recurrir en los últimos días, a la sapiencia sanadora de los voluntarios de la Cruz Roja.
Pero hete ahí que según se publica en varios medios de la Isla, La Alianza por los Tiburones de Canarias (¡Vaya nombrecito! ¿Se referirán a una versión autóctona de la famosa casta a la que aluden los chicos de Podemos?) bueno, pues esta asociación sin ánimo de lucro sugiere “promocionar la presencia de esta especie en la playa para atraer al turista que le gusta ver los fondos marinos…” y que no le importe ser mordido, añado.
Nada más engorroso que llegarse hasta Las Teresitas, con su largas colas veraniegas, sus aparcacoches, los grupos electrógenos de las casetas echando humo a tutiplen, etc, etc, y además tener que meterte en el agua mirando al fondo para no pisar a un tiburoncillo con forma de raya y esquivar también un pelotazo, de las cuadrillas de adolescentes que se perdieron la clase de civismo en la escuela.
Ya veremos lo que da de sí la propuesta de la susodicha Alianza, pero apunta a culebrón marxista (de Groucho, claro). Hombre, ya puestos, por qué no un tour turístico por el mamotreto como paradigma de “corrupción y playa”, o montar un acuario con cabrillas y salmonetes en la fuente de los patos, o quizás unas pirañitas en la charca de la Plaza España. A ver qué turista despistado tiene bemoles para refrescarse, como ocurre a menudo.
Aguardo con expectación el desenlace de la iniciativa y deseo, por supuesto, larga vida a los angelotes.
A falta de angelotes lindos, no quedamos con los angelitos negros de Antonio Machín.
Mónica Alonso Ruiz
19 agosto, 2014 en 09:10
Te doy las gracias por hablar de angelotes en tu blog. Desgraciadamente la falta de conocimiento de esta especie en extinción, y cuyo paraiso son las Islas Canarias, es uno de los problemas a los que se enfrenta.
Afortunadamente, gracias a una serie de personas, tanto de las islas como de la Península, entre las que se encuentra mi asociación Alianza Tiburones Canarias (la historia del nombre es larga de contar y nada tiene que ver ni con castas ni con Podemos), este animalito es ya un poco más conocido.
Desde nuestra asociación (te enimamos a visitar su facebook y su web) hacemos mucho trabajo divulgativo entre los jóvenes y luchamos también para que las empresas de pesca deportiva de las islas dejen de pescar esta especie, cuya pesca está prohibida en toda la Unión Europea.
Nos ha sorprendido este aluvión mediático alarmando sobre las mordeduras de crías de angelotes en la Playa de las Teresitas, y conociendo los recientes estudios que se han hecho para determina el por qué de que las crías de angelote sean tan frecuentes en esta playa tan conocida (vaya mala suerte que con todas las playas tranquilas de las islas precisamente el mejor lugar de guardería para las crías sea la de esta playa), hemos apelado a las autoridades para que protejan a este, hasta ahora desconocido animal. Y claro, no se puede vender a las Autoridades que tiene que proteger a este animal si no les vendemos que tienen potencial turístico. Y ciertamente lo tiene, pues no te puedes imaginar la cantidad de buceadores que van desde la Península a las Islas a bucear con este animal.
Entendemos que el “potencial” consiste en que se pongan unos carteles educativos para que todas las personas que acudan a la playa puedan conocer la situación de este animal y la suerte de poder encontrarlo en esta playa.
No te puedes imaginar lo que nos cuesta que el Gobierno Canario lea nuestras denuncias de pesca ilegal de esta especie protegida, y estamos indignados por su falta de actuación para sancionar a las personas que incumplen la ley matando a estos animales cuya pesca está prohibida.
Por ello te animamos a que te informes sobre todo lo que rodea al angelote canario, y esperamos que tu próximo post sobre esta especie profundice un poco más en la grave situación del mismo.
Te animamos a conocer la labor que muchos están haciendo por este animal tan desconocido.
Saludos,
Mónica Alonso Ruiz
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