Josep Molina es presidente de la Cofradía de Pescadores de L’Ampolla y cuenta su experiencia como pescador en Tarragona. Él, como todos los pescadores tarraconenses, comparte su actividad con la industrial de la plataforma Casablanca desde hace más de 30 años y, lejos de perjudicarlos, se han visto beneficiados por la presencia de tal operación.

“Desde que se inventaron los biotopos, podíamos decir que las plataformas, con los resguardos que tienen, pues ya hacían de biotopos, y la prueba es que cuanto más nos arrimábamos a una plataforma, más pescábamos”, aseguró Molina.