En los últimos meses, la compañía canaria Binter ha habilitado para muchas de sus rutas con África la posibilidad de que los pasajeros puedan facturar, sin coste añadido, una segunda maleta con un peso máximo de más de 20 kilos.
Históricamente, el conocido como comercio de maleta posibilitó el desarrollo de un negocio próspero en muchas ciudades de la costa occidental africana. Eran numerosos los comerciantes de, fundamentalmente, Marruecos, Mauritania y Senegal los que hacían sus compras en los comercios de Las Palmas de Gran Canaria para posteriormente revenderlos en sus aldeas y ciudades de origen.
Aquella tradición fue perdiéndose hasta hace muy poco. La nueva medida de Binter permitirá un mayor flujo de mercancías y capitales.
Desde la Dirección General de Comercio del Gobierno de Canarias se considera que se abre así una nueva era para el comercio de las Islas Canarias, que puede generar importantes ingresos y oportunidades de crecimiento económico y creación de más puestos de trabajo en un sector que está iniciando en los últimos meses un despegue importante.
Binter conecta actualmente Canarias con Casablanca, Marrakech, Agadir, El Aaiún, Nuakchot, Dakar, Banjul, Sal y Praia. El departamento que dirige Gustavo Matos entiende que ese auténtico puente es una oportunidad para las zonas comerciales abiertas de las Islas, que pueden captar la atención de comerciantes de estos lugares, ya que siguen muy interesados en adquirir bienes para revenderlos luego en sus lugares de origen.
En estos últimos años, África ha experimentado crecimientos económicos de hasta el 6%. Poco a poco, se han creado las condiciones para que muchos analistas hablen ya abiertamente de una pujante clase media, conectada al mundo, consumista, con criterio, al que las zonas comerciales de Canarias le suponen un aliciente con el que hace años no contaban. Esas ansias de distinguirse con objetos adquiridos en Canarias puede suponer una oportunidad importante para los comerciantes del Archipiélago.