Frank Lloyd Wright, el más respetado arquitecto de América, era natural de Wisconsin. Su trabajo aparece en todo los Estados Unidos y podría ser distinguido como Patrimonio de la Humanidad. Pero yo diría que la mejor arquitectura de Wisconsin fue producido por alguien que los isleños de Tenerife conocen muy bien: Santiago Calatrava.
Nacido en Valencia, Calatrava comenzó su carrera diseñando puentes y estaciones de ferrocarril. Desde entonces, es bien conocido en los círculos arquitectónicos. Antes de los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona, Calatrava creó la torre de comunicaciones de Montjuic. Una década más tarde, se metió en un proyecto más grande y renovó el Complejo Olímpico de Deportes de Atenas, para los Juegos de Verano 2004.
Aunque muchos lo consideran uno de los arquitectos de la élite del mundo, Calatrava tiene sus críticos. Un político de Valencia creó un sitio web llamado Calatravatelaclava para destacar los defectos de diseño y sobrecostos de sus obras. He leído que el arquitecto ha tenido que vérselas con pleitos por edificios ruinosos y con un proyecto que excede en 1.000 millones de euros lo presupuestado cuando se cifró sólo en 300. Calatrava ganó 30.000 euros tras un juicio por daños y perjuicios contra el sitio web que lo atacó.
Entre sus proyectos olímpicos, Calatrava diseñó dos edificios que son familiares para mí. Aunque la mayoría de los estadounidenses saben de Calatrava por su trabajo actual cerca del World Trade Center en Nueva York, su primer edificio americano fue en Milwaukee, Wisconsin, a 60 kilómetros de mi casa. A finales de 1990, el museo de arte necesitaba una renovación y Calatrava recibió la oferta. Hoy, su Pabellón Quadracci es el edificio más reconocible en el horizonte de Milwaukee. Recuerdo haber visitado el museo en la escuela primaria. Habíamos visto con asombro aquellas alas blancas del edificio, que se extiende a más de 65 metros.
Los isleños conocen a Calatrava mucho mejor por su trabajo en el Auditorio de Tenerife, que se inauguró en el año 2003. Igual que el Museo de Arte de Milwaukee es el lugar más famoso en la costa de Wisconsin, el Auditorio es el encanto de la costa de Tenerife. Es el Sídney del Atlántico, con el estilo expresionista parecido el teatro de la ópera en Australia.
Curiosamente, el estilo de Calatrava está influido en gran parte por Frank Lloyd Wright. “Su trabajo está tan lleno de emoción”, dijo Calatrava sobre Wright en una entrevista con la Architectural Record. Cuando Calatrava visitó Taliesin West, la famosa casa de Wright en Wisconsin, él se mostró emocionado por el instinto poético de Wright. “Se puede sentir otra dimensión en sus edificios, empatía con la naturaleza; eso sólo puede venir de la intuición, de la idea de que la arquitectura puede ser algo sublime”, indicó.
Es intrigante ver cómo la gente y los lugares se cruzan. Wright dejó una impresión en un arquitecto español, quien, a su vez, dejó su sello personal en el estado natal de Wright.
*Ben Bartenstein, natural de Wisconsin, escribe para Canarias3puntocero como becario de Periodismo de Macalester College (St. Paul, Minnesota) en su ruta hacia Marruecos, donde residirá también como periodista.
