La utilidad de lo inútil

“La utilidad de los saberes inútiles se contrapone radicalmente a la utilidad dominante que, en nombre de un exclusivo interés económico, mata de forma progresiva la memoria del pasado, las disciplinas humanísticas, las lenguas clásicas, la enseñanza, la libre investigación, la fantasía, el arte, el pensamientos crítico, y el horizonte civil que debería inspirar toda actividad humanas. En el universo del utilitarismo, en efecto, un martillo vale más que una sinfonía, un cuchillo más que una poesía, una llave inglesa más que un cuadro: porque es fácil hacerse cargo de la eficacia de un utensilio mientras que resulta cada vez más difícil entender para qué pueden servir la música, la literatura o el arte”. Pues para generar la virtud, para evitar una vida plana, para perseguir una vida orientada por la curiosidad del espíritu y de las cosas humanas. Un mundo sin literatura (Vargas Llosa) sería un mundo sin deseos ni ideales ni desacatos. “Lo inútil es necesario para hacer que cualquier cosa sea más bella” ¿y acaso el hombre no se emociona, no persigue -o debería perseguir- la belleza? (me niego, por tanto, a considerarlo como inútil, quizás, ¿no cuantificable?) “Si dejamos morir lo gratuito, si renunciamos a la fuerza generadora de lo inútil, si escuchamos únicamente el mortífero canto de sirenas que nos impele a perseguir el beneficio, sólo seremos capaces de producir una colectividad enferma y sin memoria que, extraviada, acabará por perder el sentido de sí misma y de la vida”.
En ese primer párrafo se encuentra la esencia de este ensayo, en donde su autor, Nuccio Ordine, nos muestra, además, un recorrido histórico por escritores y filósofos que, desde los tiempos anteriores a Cristo pasando por los siglos XV, XVI, XVII, XVIII y XIX hasta la actualidad, critican el dinero y el utilitarismo como el único interés de la raza humana y reclaman la importancia de lo inútil (de lo no cuantificable). Todas las citas utilizadas, desde el sabio Zhuang Zi, en el siglo IV antes de Cristo, hasta las reflexiones de Heidegger en 1963, critican los recortes en la cultura, el desinterés por las artes, la acción política dirigida a la utilidad despreciando la importancia de lo inútil. Cada una de las citas recogidas a lo largo de la historia en este ensayo son perfectamente actuales en el contexto que vivimos hoy en día.
Y me pregunto yo: ¿Acaso hemos cambiado en algo? ¿Acaso no sea una característica de la raza humana que una gran mayoría se regirá siempre por lo útil mientras que tan solo una minoría apreciará la necesidad de lo inútil, de lo no cuantificable? Y esa minoría, ¿está yendo a menos, o es ésta la eterna pregunta a lo largo de la historia de los que defendemos la imperiosa necesidad de lo no cuantificable?