Hermana Radio: Antonio Betancor

No se entiende la historia de la Radio en Canarias sin el inconfundible tono grave de Antonio Betancor, primero en Radio Popular de Las Palmas y, posteriormente desde Radio Nacional de España (RNE). También se convirtió en un rostro muy popular, que cada semana entraba en las casas de las Islas con el legendario programa de folclore Tenderete, en Televisión Española. Ahora, jubilado y como oyente, nos confiesa ser un fiel a la SER, Radio 3 y Pepa Fernández, los fines de semana en Radio Nacional.
¿Cuáles son tus primeros recuerdos?
De jovencito me despertaba con Alborada Guanche de ¿Radio Juventud?. Levantarte con aires musicales de la tierra elevaba el optimismo y las ganas de todo. Desde luego, escuchaba Radio Atlántico desde la mañana a la noche. “Nuevo Día”, primer programa que presentaban Pepita Chirivella y Paco Montesdeoca asistidos por el técnico Luis Falcón; Archipiélago Noticias que dirigía Luis Jorge Ramírez; Los deportes a cargo de Pascual Calabuig y posteriormente por Segundo Almeida; Terror en las Ondas, un programa preparado por Bernardo de la Torre que contaba con un cuadro de actores con gente de la casa… También seguía, ocasionalmente, las emisiones de Radio Las Palmas, siguiendo a voces veteranas como José María Ayaso, Fernando Goyena, Margarita Sánchez Valerón y desde luego a Mara González.
¿Cómo fueron tus primeros pasos?
Mis comienzos en la radio se remontan a principio de los años 60. Con solo 13 años comencé a trabajar de botones, recadero, en la desaparecida Radio Atlántico. Más que un trabajo fue una gran escuela para mí gracias a la calidad, tanto humana como profesional, de gente de aquella casa como: Luis Jorge Ramírez, Pascual Calabuig, Bernardo de la Torre, Cristóbal Campos, Matías Aragunde, Paco Montesdeoca, Pepita Chirivella… que contribuyeron a que conociera y me interesara por el maravilloso mundo de la radio y me preparara concienzudamente. Consolidada Radio Popular de Las Palmas, que empezó a emitir en 1971, comencé a colaborar con comentarios varios una vez por semana hasta que en Enero de 1975 me propusieron formar parte de su plantilla como redactor-locutor de sus informativos. Aquí me volví a sentir arropado por profesionales de la talla de Gonzalo Monasterio, Alicia Fernández, José Antonio Baeza, Flora Martín, Vicente Torres, viviendo importantes acontecimientos informativos que se sucedieron antes y después de la muerte de Franco: Desmantelamiento del Sindicato Vertical; Descolonización del Sahara; Conflicto Pesquero como consecuencia de lo anterior; Desaparición de Eufemiano Fuentes; Elecciones Generales….
Hasta que llegas a Radio Nacional, ¿verdad?
Exactamente. En 1978, lo que hasta entonces era una simple corresponsalía, se convirtió en estudios de Radio Nacional de España en Canarias en Las Palmas de Gran Canaria dotados con una plantilla de la que pasamos a formar parte Alicia Fernández, Vicente Torres y yo mismo. Aquí, en Radio Nacional de España, permanecí hasta mi pre-jubilación, en 2007, ostentando cargos como Jefe de Programas, Jefe de Informativos y finalmente como Director solo unos meses.
¿Qué escuchas ahora?
Ahora, una vez jubilado, sintonizo permanentemente con la SER. Me despierto con Pepa Blanco; Me despabilo con Evaristo Quintana en su Hoy por Hoy el Drago; me asomo a La Ventana con Carles Francino; y cierro con Hora 25 con Ángels Barceló; Y me duermo con El Larguero de Manu Carreño. Los fines de semana suelo estar pendiente de las novedades que nos ofrecen en Radio 3 de Radio Nacional los hermanos Pizarro a través de Melodías Pizarras; Y sigo en Radio 1 a Pepa Fernández en No es un día cualquiera.
¿Qué recuerdas de tu paso por el medio?
Difícil estar satisfecho de tu trabajo en la Radio. Siempre te autocriticas, pero podría apuntar los dos viajes a los campamentos de refugiados de Tinduf como enviado especial de Radio Popular y de Radio Nacional. También me acuerdo del seguimiento que hicimos del conflicto del sector pesquero tras el abandono del Sahara, de mi participación en todas las elecciones desde las de 1977 hasta que me pre-jubilé o sacar la Radio a la calle en 1991. Radio Nacional de España en Las Palmas estuvo presente el verano de ese año en todos los Municipios de la Provincia de Las Palmas.
¿Y el futuro, cómo lo ves?
Cuando apareció la televisión en nuestro país, se comentaba que la caja tonta iba a ser la tumba de la Radio. No solo no le afectó, sino que quedó claro que la radio tenía vida eterna. La inmediatez sigue ganando por goleada. Y ahora con los avances tecnológicos, todavía más. ¡Claro que le veo futuro!, pero eso depende de la utilidad que se le dé. Hay que apostar por estar más cerca del ciudadano, con un lenguaje cercano y con propuestas que les interese. La radio puede y debe ser vehículo de recuperación de valores. Los valores que hemos ido perdiendo: educación, respeto, tolerancia… Hacer realidad las funciones básicas de la Radio: Informar, formar y entretener.
¿Qué te disgusta de la Radio que se hace ahora?
No me gusta la falta de rigor. Cualquiera se atreve a ponerse ante un micrófono, sin prepararse siquiera un mínimo guion. La ignorancia y el insulto, además de las manipulaciones ideológicas, se han instalado, desgraciadamente, en muchas estaciones de radio.
¿Por antena o por internet?
Tecnológicamente hemos avanzado hasta lo insospechado. Ahora mismo, cualquier emisión radiofónica puede ser escuchada en cualquier parte del mundo a través de internet, o desde un móvil. ¿Quién pensaba eso hace solo unos años?… Por ello debemos ser más rigurosos que nunca para seguir manteniendo la fiabilidad.
Un último mensaje…
Añadir simplemente que me gustaría que se consolidara un gran encuentro de profesionales de la radio en las islas en el que, periódicamente, analizar la situación de la radiodifusión en Canarias y aportar propuestas que beneficien su andadura. Por ejemplo, y lo dejo ahí, formación y cursos de locución. Me castigan los oídos algunas voces (muchas) que se tutean con el micrófono tanto en Radio como en Televisión.