Otro hervor a la ‘gran cazuela’ atunera de Mogán

No había presenciado, desde hace tiempo, una celebración tan emotiva, tan sentida entre otros ‘pequeños’ grandes momentos como una de las acaecidas en la reciente Feria del Atún y el Mar de Mogán. Anunciaban que el bar La Jaca, de María Cejas y Alexis Santana, había conquistado el certamen de la tapa de los establecimientos representados en la gran carpa instalada en la plaza Pérez Galdós de Arguineguín.
Ellos, junto a sus familiares, señalaban hacia el cielo (abrazos por doquier) y prácticamente no podían contener las lágrimas al recibir el galardón con el que los periodistas gastronómicos de Canarias y de la Península otorgaban para la mejor versión de bocado esta tercera edición del encuentro ‘atunero’.
Fue uno de esos instantes estelares, por supuesto, porque todo despliegue humano que se precie debe tener en cuenta, por encima de todo, a las personas, como esas cocineras y cocineros que reforzaron sus esfuerzos para servir, por ejemplo, una tonelada de caballas y 300 kilos de papas durante el asadero popular que con sabores y brasas contribuyó a la atmósfera festiva de la primera noche.
El municipio moganero se adentraba por tercer año consecutivo en sumar con la fuerza que irradian los túnidos y pescado azul de la zona, en un entorno marinero del que salieron las viandas marinas que todos pudimos degustar.
Una serie de aderezos, con esos bancos repletos de gentío, que realmente hacen que en este tercer escalón de la Feria y desde que naciera podamos afirmar que el encuentro crece. Datos son datos y ahí está el logro de la organización en general: Vanesa Santana, las asociación Mojo Picón, con Davidoff Lugo,… Es que si nos ponemos a ennumerar…
Datos son datos, como comentaba, y uno incontestable es que por allí pasaron 10.000 almas que pudieron probar todo tipo de bocados relacionados con el atún. Por cierto, que muy buena apuesta el cambio de ubicación del Puerto de Arguineguín a la plaza a la que da nombre el insigne literato. Mucho más desahogo y espacio.
Un marco, pues, eminentemente popular y con detalles repartidos en fórmulas para todos los gustos a lo largo de tres jornadas, con la firme puesta en valor que el Ayuntamiento la alcaldesa Onalia Bueno pretendían para esta nuevo ‘pase’ de la Feria atunera. Dar la máxima visibilidad a un recurso marino que, si bien goza de buena salud, debe contar con todos los apoyos (administrativos, de recursos y de consumo popular) en línea siempre con las particularidades que genera una realidad socioeconómica incontestable como es la realidad de la pesca desde esta zona sur de Gran Canaria.
Para referencias de lo acontecido, ahí están las informaciones que pueden extraerse siempre en una página web o en un enlace (les dejo este con la info). Pero de la crónica viajera debe rezumar las sensaciones de unos estímulos personales, esta vez con unos compañeros de viaje que aportan y mucho en puntualizaciones que luego se van a volcar para mejorar futuras ediciones. Al fin y al cabo, el éxito también se mide en sensaciones respecto a anteriores ediciones y en esta tercera se ha percibido un plus.

María José y Alejandro Casa Enrique
Bien es verdad, y no cabe duda de esto, que hay que sacar el ‘cuaderno de apuntar’ de “este esto no se vuelve a hacer más así, esta cuestión se retoca,… o esto nunca más…”. Pero, en definitiva, creo que todo lo aportado y vivido en esta tercera feria dar ha dado de sí para la evolución, que va a ser a más, tomando en cuenta la visión de esos bancales repletos de personas disfrutando de los homenajes marineros’.
Me encantó también esa aportación tan enriquecedora de ponencias y showcooking del gran escenario, con un Óscar Dayas, cocinero comprometido, pendiente de todos los detalles junto a su equipo –¡gracias Kevin por todas las facilidades!-. La frescura del concepto de terruño de Borja Marrero (Texeda); las ideas conceptuales de Erlantz Gorostiza (MB Abama, dos estrellas Michelín) o la explicación de la esencia siempre mágica de la cocina peruana (Qapac, Los Cristianos) a cargo de Rosalía Díaz.
Mientras, probando vinos de la isla y saboreando bonito con tomate, croquetas de atún, bonito ahumado sobre cuscús espirulina o los daditos de atún con salsa tzatziki, atún encebollado ceviche,…
Vuelvo a la familia de La Jaca. Se llevaron el premio con su atún en vinagreta de frutos rojos sobre parmentier de papas, coliflor y wasabi. Alexis Santana dejó claro su empeño por plasmar algo rico, muy bien tratado el atún, aunque en principio una parmentier fría; con una ligera rectificación sobre este detalle, el cocinero, ni corto ni perezoso, se lanzó a darle más vida a n conjunto que al final fue el que más convenció al jurado.
Pero si de campeonatos se trataba, también fue un momento trepidante el del Mejor Plato de Atún de Gran Canaria, con seis participantes. Joel Trujillo (Summum) se llevó ‘el atún al agua’ y en segundo lugar, compartido, para Abraham Ortega (El Santo) -que partía con muchas posibilidades- y Antonio Pérez. Richard Díaz (El Santo), Carlos salía del restaurante La Terraza del Gabinete Literario y Adrián Noguera del marea Maroa Club del Mar
Joel Trujillo exhibió la mejor propuesta, a juicio de un solvente jurado, con el atún curado con caviar de algas, aire de jengibre encurtido y pepino y puré de zanahoria encurtida.
Otro momento en el que los periodistas pudieron intercambiar opiniones (denominado hoy networking) en un ambiente distendido fue el de un paseo en barco por el litoral de Mogán y la propuesta del restaurante Casa Enrique, del matrimonio Alejandro Álamo y María José, que agasajaron con aceitunas aliñadas, almogrote, tabla de quesos, empanadillas de bonito, ceviche, atún en mojo hervido, aguacate del municipio, mango, vino de la isla… Los comunicadores pudieron intercambiar información siempre constructiva para contribuir en futuras ediciones.
Así que, una vez más y después de valorar con el reconocimiento de este periodista a todas esas PERSONAS que han hecho posible que todo haya funcionado a buen nivel, cabe destacar ese motor marino que ha servido de gancho a más de 10.000 visitantes. Trabajo intenso que desde esta crónica reciba el respeto y el reconocimiento.
Un breve apunte. A lo mejor en otros meses sería cuestión de ubicar esta manifestación atunera para contar con más ejemplares. La noche del sábado descargaron varios ejemplares de obessus capturados de forma artesanal.
¡Que cunda el ejemplo!