Maduro se inventa un diálogo y libera al vicepresidente del parlamento

El gobierno de Maduro liberó al vicepresidente de la Asamblea Nacional, Edgar Zambrano, detenido desde el pasado el 8 de mayo por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), acusado de presunta participación en un golpe de Estado.
#COMUNICADO de la Comisión para la Verdad, la Justicia, la Paz y la Tranquilidad Pública en relación a la solicitud de revisión de medida cautelar sustitutiva de privativa de libertad otorgada a favor del Diputado EDGAR JOSÉ ZAMBRANO RAMIREZ pic.twitter.com/9gu9ZguiBX
— Tarek William Saab (@TarekWiliamSaab) September 17, 2019
Zambrano fue detenido el 8 de mayo de este año, en la urbanización La Castellana de Caracas, cuando conducía su camioneta. Efectivos del Sebin rodearon el coche y al ver que se negaba a bajarse, lo remolcaron en una grúa y lo detuvieron. Zambrano sale en libertad un día después de instalarse en Caracas una Mesa Nacional de Diálogo entre el gobierno y cinco partidos de oposición, entre los que no está el partido de Guaidó.
Guaidó y Zambrano encabezaron, junto a Leopoldo López, un alzamiento militar el pasado 30 de abril. Tras lo cual López se hospedó en la Embajada de España en Caracas y Zambrano fue detenido. Guaidó siguió libre.
Luego de ese intento de golpe de Estado, en el mes de mayo se inició un proceso de diálogo entre el gobierno y representantes de la oposición de Guaidó con la mediación de Noruega. Sin embargo, Maduro le dio una patada a esa mesa el pasado 8 de agosto por considerar que Guaidó mantenía una postura “entreguista” hacia las sanciones impuestas por Donald Trump a Venezuela. El diálogo quedó congelado.
Cuando pensábamos que el diálogo estaba muerto, apareció este lunes 16 de septiembre el gobierno con la firma de una serie de acuerdos en el marco de una nueva Mesa Nacional de Diálogo. Esos acuerdos incluyen seis puntos fundamentales: conformar un nuevo directorio del Consejo Nacional Electoral (CNE); defender los derechos de Venezuela sobre la Guayana Esequiba; intercambiar petróleo por alimentos y medicinas; rechazar las sanciones económicas impuestas por EEUU; incorporar los diputados oficialistas (quienes se habían auto excluido) a la Asamblea Nacional y liberar presos políticos.
Guaidó inmediatamente dijo que el diálogo de Barbados quedó agotado y que él propuso un Consejo de Gobierno plural para convocar elecciones presidenciales. Además endosa la liberación de Zambrano a la presión contra Maduro y no a la Mesa de Diálogo que se instaló el lunes.
Por ello, hago pública nuestra propuesta de solución que el régimen negó: la salida de Maduro y mi separación de la presidencia encargada, y la conformación de un Consejo de Gobierno plural para dar entrada a la ayuda humanitaria y convocar elecciones presidenciales libres. pic.twitter.com/bjI9TBsmDD
— Juan Guaidó (@jguaido) September 16, 2019
Las redes sociales estallaron con ese diálogo que se inventó Maduro, con unos representantes de la oposición minoritarios, pero un poco más pensantes y menos radicales que Guaidó y sus amigos. Noruega quedó en la historia y Guaidó está a punto de quedar también como un recuerdo, luego de 9 meses prometiendo “cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres” y sin poder cumplir con nada.
Se queda desinflado y sin apoyo, mientras Maduro se inventa un diálogo con el que busca ganar tiempo. Mientras, el circo continúa sin que la historia prometa un final feliz.
*Fotografía tomada del perfil de Facebook de Edgar Zambrano.