Hospiten ofrece recomendaciones para evitar el síndrome del corazón festivo esta Navidad

La Navidad a veces es excusa para comer y beber más y estos excesos nos pueden jugar una mala pasada. Según la Fundación Española del Corazón (FEC), los días del año en el que hay más consultas por problemas cardiacos relacionados con el alcohol son los días 24, 25, 26 de diciembre y el 1 de enero.
Para el jefe del Servicio de Cardiología de Hospiten Rambla, el doctor Antonio Castro del Castillo, “los problemas cardiacos en estas fechas se deben a varios factores que pueden influir: por un lado los compromisos sociales y familiares que en algunas personas provoca una alteración emocional y un mayor nivel de estrés que repercute en la salud; por otra parte, los excesos en la alimentación, la ingesta de alcohol y los cambios en nuestros hábitos de vida, influyen en el mal control de factores de riesgo para nuestra salud como la presión arterial, niveles de azúcar en sangre, el colesterol, etc. Todos estos factores determinan que en estos días aumenten los problemas relacionados con la salud cardiovascular (infarto, ictus, arritmias…) en comparación con otras épocas del año“.
Concretamente, el síndrome de corazón festivo o “Holiday Heart” se debe a arritmias como las extrasístoles o la fibrilación auricular en relación con la ingesta excesiva de alcohol, en los días previos. Los síntomas que nos alertan que estamos padeciendo este síndrome son palpitaciones, falta de aire, sudoración y sensación de mareo. Si presentas estos síntomas, acude a tu médico quién podrá diagnosticar si existe un problema serio.
Este síndrome se describió en 1978 cuando Philip Ettinger estudió los casos de 32 hospitales y se dio cuenta de que tras una serie de días libres aumentan los casos de pacientes con problemas cardiovasculares. La causa común era el aumento de bebidas alcohólicas durante las fiestas y afecta más a hombres que a mujeres.
Desde el Grupo Hospiten se recomienda:
1. Cocina saludable, con poca grasa.
2. Consumo de frutas, verduras y hortalizas.
3. Reducir la sal en las comidas.
4. No repetir postre: huir de los excesos.
5. No picar dulces entre las comidas.
6. Evitar excesos con el alcohol.
7. No irse a la cama inmediatamente después de una comida copiosa.
8. El agua, más necesaria que nunca.
9. Realizar ejercicio suave diariamente, como puede ser pasear.
10. No olvidar tomar la medicación diaria como de costumbre.
Y recordar que las fiestas son muy prolongadas, por lo que es necesario dosificar.