Para manojos agasajadores, los de los berros

Mastuerzo de agua, agrón, zaporra, erreka, créixens… En definitiva, BERRO (con mayúsculas), como se le conoce en distintas zonas de España. En Canarias, el insigne vegetal adquiere ribetes de icono a partir de los tan renombrados potajes, con los que abuelas y madres han “sentado las madres” de generaciones de isleños agradecidos.
“De pequeños, los berros se nos hacían el calvario de los sabores, nos parecía fuerte y amargo. Pero eso era algunas veces, cuando lo hacía mamá; siempre iba con prisas y con tanto ajetreo, se podía olvidar hasta de la batata, indispensable para quitarle esa fuerza sobrenatural de los berros. Pero cuando lo hacía la abuela… era otra cosa”.
En realidad, a este digno representante de la “despensa verde”, originario de Asia septentrional y Europa, se le asocia más en el Archipiélago a los soberanos potajes que son capaces de procurar ese indiscutible bálsamo estomacal y célebres en rincones de La Gomera y en Gran Canaria, principalmente en Firgas.
Asoman también buenas mañas, por supuesto, en el resto de las Islas, en las que cada “maestrillo tiene su librillo.
Por su probada eficacia como género desintoxicante, depurativo y fortalecedor, sus propiedades nutritivas han sido aprovechadas en ensaladas con la materia prima en crudo. El cultivo requiere grandes cuidados y una importante presencia de agua.
Cabe recordar las alabanzas que hiciera a los berros, durante una escala en Tenerife, el marino y cartógrafo James Cook a mediados del siglo XVIII, junto a la calabaza canaria y a los productos frescos de la tierra. En su visión de época, el explorador ni barruntaba la versatilidad de este vegetal. No sólo como base de platos caseros, también para convertirse en ingrediente de las recetas más innovadoras y creativas.
Pero no sólo los veamos en potaje. Háganse una idea: desde panecillos artesanos a la mayonesa o la mantequilla con curry hasta formato de croquetas apetecibles. Además de gazpacho o un curioso rollito de primavera con chutney de tomate. Soberbios con atún en adobo verde de berro con papas negras salteadas a la soja o en milhojas de conejo en escabeche de berros y pimentón. Postres fenomenales: mousse de miel y categóricos bombones de chocolate puro al 67% y gel de berros.